Ya estamos metidos en la semana de pasión, la Semana Santa.
Como es tradicional las cadenas de Televisión nos van a volver a pasar las películas de siempre; los clásicos peplums, históricas, versiones de la biblia de la pasión etc etc. Muchas de ellas obras maestras,clásicos del cine, producciones del Hollywood dorado, repletas de oscars y grandes estrellas.
Como es tradicional las cadenas de Televisión nos van a volver a pasar las películas de siempre; los clásicos peplums, históricas, versiones de la biblia de la pasión etc etc. Muchas de ellas obras maestras,clásicos del cine, producciones del Hollywood dorado, repletas de oscars y grandes estrellas.
Vienen a mi memoria Quo Vadis, Spartaco, Ben-Hur probablemente a mi y a casi todos los que les guste el cine. Vistas y revisitadas mil veces, pero no se porque siempre acabamos como mínimo empezandolas y aguantando hasta que la publicidad nos vence y desistimos, siempre nos quedara el DVD...
Citadas estas tres, es curioso que las tres contengan cierta carga digamos contraria a las doctrinas y éticas de la Iglesia, en las tres hay personajes, guiños y diálogos que bien pudieran ser contrarios a cierta manera de creer o de pensar.
Empezare por Quo Vadis (1951) de Melvyn Leroy, protagonizada por Deborah Kerr, realmente bella en su papel de Ligia, la esclava libertada y adoptada por cristianos, Robert Taylor en la cúspide de su carrera como el General Marco Vinicio; Peter Ustinov como el Emperador Nerón, papel que le valió su único Oscar de la Academia, y Patricia Laffan como la perversa y manipuladora Popea.
En Nerón y Popea digamos que esta lo subversivo. Nerón despótico, paranoico y egolatra llevara el caos a las calles de Roma con el legendario incendio, más ser uno de los emperadores romanos que persiguió y sacrifico a muchos cristianos en el circo romano. Popea, la perversa mujer de Nerón conspira,manipula y ejecuta de forma maquiavelica su venganza para con Marco Vinicio por ser despechada por él.
De Ben-Hur (1959) de Willyam Wyler, la película más laureada por la Academia hasta la infumable y sobrevalorarda Titanic. Charlton Heston luciendo su espectacular torso interpreta a Juda Ben-hur y Stephen Boyd a Messala, un judío y un romano amigos y supuestamente algo más, esa es la leyenda subliminal sobre estos dos personajes que llevan su amistad, pasión, ansias de poder, ambición y venganza hasta el duelo final en la legendaria carrera de cuadrigas donde Messala encontrará la muerte.
La química que desprende cada escena en la que los dos personajes aparecen es realmente palpable y creíble, Boyd en el papel de su vida ejecuta a la perfección esa homosexualidad encubierta en cada escena de tensión con Heston.
Clásicos de la industria, de un cine que empezaba a cambiar de la mano de directores como Stanley Kubrick que con la ayuda del genial Dalton Trumbo y la productora de Kirk Douglas realizan una de las obras maestras del cine de todos los tiempos, Espartaco (1960), los créditos de Saul Bass, y Kubrick encumbrándose a lo más alto tras “Senderos de Gloria” , un reparto donde ademas de Douglas encontramos a Charles Laughton, Laurence Olivier, Peter Ustinov, Toni Curtis realmente esplendidos.
Censurada en su tiempo, y no rescatada y exhibida hasta la restauración a principios de los 90 (Anthony Hopkins dobla majestuosamente a Oliver en la escena censurada porque el audio se había perdido), la famosa escena del baño entre Craso (Oliver) y Antonino (Curtis), donde el esclavo baña al Amo y en un dialogo metafórico se habla de bisexualidad de una forma sutil y para nada escandalosa, en un ardid de Trumbo usando de forma magistral analogías y metáforas para escenificar una seducción homosexual.
GUION DE LA ESCENA DEL BAÑO:
Craso: ¿Robas, Antonino?
Antonino: No, amo.
Craso: ¿Mientes?
Antonino: No, si puedo evitarlo.
Craso: ¿Has deshonrado alguna vez a los dioses?
Antonino: No, amo.
Craso: ¿Te reprimes de todo vicio para respetar las virtudes morales?
Antonino: Sí, amo.
Craso: ¿Comes ostras?
Antonino: Cuando las tengo, amo.
Craso: ¿Comes caracoles?
Antonino: No, amo.
Craso: ¿Consideras moral comer ostras e inmoral el comer caracoles?
Antonino: No, amo. Claro que no.
Craso: Cuestión de gustos, ¿no?
Antonino: Sí, amo.
Craso: Y el gusto no es lo mismo que el apetito, y por tanto no se trata de una cuestión de moralidad, ¿no es así?
Antonino: Podría verse de esa manera, amo.
Craso: Es suficiente. Mi toga, Antonino.
Craso: Mi gusto incluye... tanto los caracoles como las ostras.
De las tres citadas esta es mi preferida, tengo una buena copia en DVD de la versión restaurada y suelo revisarla una vez al año aproximadamente y no me canso de verla.
Enrique Irazoki en el papel de Jesucristo de EL EVANGELIO SEGUN SAN MATEO (1964) de Pier Paolo Pasolini.
Willem Dafoe como Jesucristo en LA ULTIMA TENTACION DE CRISTO (1989) de Martin Scorsesse.
James Caviezel como Jesús de Nazareth en LA PASION DE CRISTO (2004) de mel Gibson.
Pero como decíamos es época de pasión, una semana en la que lo que realmente ocurrió fue una pequeña rebelión, una revolución, quizás la primera de la humanidad, un hombre armado solo con su capacidad de convocatoria, su oratoria y su forma de hacer y ser puso en jaque a toda una comunidad; que sea el hijo de Dios, que hiciera milagros o que realmente resucitara la verdad es que es algo que no creo, pero respeto al que lo cree.
Pocas películas nos pueden dar un alcance real de Jesús y de su Pasión, quizás la de mel Gibson se acerque un poco a ese escenario histórico, más mostrado y filmado como algo cruel y violento en el que la oscuridad de su trama y su desarrollo hacen que sea una película demasiado lenta en la que si uno no esta atento es fácil perderse y acabar aburriéndose, como el final ya se sabe tampoco vamos a descubrir quien es el asesino por lo que en ese sentido la de Gibson no deja de ser una versión bastante fundamentalista de una religión...
Los hechos, en su ensañamiento no merecen interés, e incluso el film respira un aire bastante antisemita, la violencia gratuita mostrada realmente sobra si de verdad se quiere explicar algo más acerca de este hombre, parece que se limite sólo a detallar y narrar esos hechos. La sangre es sangre sea de Jesús o de cualquier otra victima, exceder en ese ensañamiento no hará mas fieles ni más luz sobre unos hechos ocurridos en Judea hará unos 2000 años aproximadamente.
He visto tres películas sobre la Pasión, la comentada de Gibson, La Ultima Tentación de Cristo de Martin Scorsesse y El Evangelio Según San Mateo de Pier Paolo Pasolini, tres versiones de un mismo hecho, tres formas diferentes de enfocar y retratar esa historia. Es mas creíble y clara la miseria que emana la de Pasolini que la parafernalia en la que se envuelve la de Gibson, Scorsesse polemizo con la figura de maría Magdalena pero un guión demasiado enrabasado más que aclarar te dejaba hecho un lió con las dudas planteadas y la polémica que genero hace 20 años la figura de María Magdalena.
De las tres, la obra de Pasolini es la mas sincera, hay autenticidad en cada plano, en cada escena, frase o dialogo del guion del propio Pasolini basado en el Evangelio propio e interpretada por actores amateurs . Una pasión irracional de los últimos días de la vida de Jesús. Cada escenario tiene fuerza propia, refleja el poder y la pobreza de tal forma que ves la realidad actual en la que el poder y la pobreza siguen estando separados y existen, donde uno manipula se beneficia y usa al otro de igual forma que hace 2000 años.
Lenta, densa, y probablemente desfasada en el tiempo pero posee la esencia de una manera de hacer cine y de transmitir un mensaje como pocas obras lo pueden hacer, bajo la mano del polémico Pasolini maestro en esta forma de rodar.
7 comentarios:
Magnífico post para cinéfilos, de acuerdo con muchas ideas de las que expones.
Como siempre, disfrutando de leerte, aunque no siempre esté de acuerdo con tus escritos.La claridad, la exposición, la contundencia, la gran variedad de temas, y en muchas ocasiones la belleza, hace que sea un gustazo visitar este blog con gran asiduidad.
Caterina.
Bueno querido, no tengo por menos que contestarte, acabas de relatarnos quizá lo mejor y lo peor de la Semana Santa. Excelente el dialogo de Antonino y Craso, siempre fué mi favorito...así era el cine antes...implícito, oculto y evidente. Los mejores para las mejores producciones. Así hoy, no nos sorprende tanto ver una Roma esplendorosa reconstruida con técnicas de ordenador. _Aunque para mi, siempre serán mejores esos clasicos, tambien descubro el valor de las nuevas generaciones como Mel Gibson, o Russel Crown, eso sí, la publicidad aplastante son capaces de sacar de contexto a cualquiera.
Dicho lo cual, pasa una buena fiesta disfrutando de lo que nos echen, o echando manos de las joyas del septimo arte que todos atesoramos en nuestra videoteca, acompañado de unas buenas torrijas.
Besos, (bajo mis pies)
no me gustan las torrijas, por aquí hay una zona en la que preparan "orellots" (una pasta seca azucarada que me gusta más...)acompañado de un buen moscatel o un poco de ratafia (licor típico de Osona).
Gracias Moon & misteriosa caterina.
Disfrutad tambien vosotras de la pasión, y no hace falta que solo la disfruteis en esta semana, la pasión es vital para vivir.
Siempre me pregunte... si Craso era bisexual y ademas el propietario de Antonino y Antonino le gustaba...¿que necesidad tenia de "seducirle"?. Supongo que en la época romana, lo mismo que no le daría explicaciones a una esclava simplemente tendría relaciones sexuales con ella, igual pasaría con un esclavo, se lo hubiera cepillado allí mismo si le apetecía.
Lo que pasa es que claro, eso no podia mostrarse entonces.
¿Y no es más sublime que el guión y tu imaginación te lleven a pensar en lo que acabas de escribir en lugar de mostrarnoslo explicitamente si pudiera rodarse y mostrar la escena?
Entonces el guión no guardaria esas lineas ya que el Amo lo pondria mirando a Cuenca cuando le apeteciera sin preambulos ni chachara, y ya ni comentariamos la escena por su elegancia y uso de las analogias. El cine es arte , no "realidad".
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