lunes, 18 de enero de 2010

REFLEJOS EN UN OJO DORADO.

REFLEJOS EN UN OJO DORADO.

Weldon : Pareces una andrajosa andando por la casa. Los Langdon vienen a cenar, es de suponer que no te sentaras a la mesa así.
Leonora : Y porque no cursi?
Weldon : Cada día me das mas asco.
(ella se desnuda delante de el, en medio de la sala de estar)
Weldon : Te matare, juro que te matare, no hagas esto otra vez o te mato.
Leonora (desnuda) : ¿No has salido nunca a la calle con un collar al cuello y molido a palos por una mujer desnuda?
XXXXX
Con "Reflejos en un ojo dorado" Houston exprime a Brando y Taylor en un duelo actoral impresionante, el atormentado militar y su insaciable mujer se despellejan en cada escena. Brando no puso impedimento en encarnar a un militar homosexual, atormentado por su impotencia y todo un cúmulo de tensas relaciones personales que irnan explotando con el desarrollo de la película. Su esposa, Taylor, una mujer insaciable y, lógicamente, insatisfecha. Los personajes secundarios no están ausentes de sus propios problemas y dramas personales confluyendo todos en un nucleo formado por la pareja protagonista.
John Huston sacó partido hasta lo indecible de la breve novela homónima de Carson McCullers, ambientes como el de "Un tranvía llamado Deseo" y "La gata sobre el tejado de zinc caliente" espíritu de Tennessee Williams, mirada al interior del ser humano, sus miserias más inconfesables, el armario que todo el mundo parece tener y ocultar. Complejo drama que si algo destila es autenticidad, molesta e hiriente, pero autenticidad.

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