VAN DONGEN EN EL PICASSO. Me acerque al Museu Picasso para ver la exposición sobre VAN DONGEN, mi ignorancia sobre la existencia de esté pintor era total, pero esas corrientes pictóricas de finales del XIX y principios del XX son las que más me gustan. Unas imágenes de sus cuadros en La Vanguardia fueron el reclamo perfecto para acercarse al Picasso.
Entre guiris que apestan a bronceado y sangría y abuelitas encroquetadas en maquillajes baratos, pseudo intelectuales que van de expertos y familias que aparentan ciertas inquietudes culturales hice la cola, visite la exposición y disfrute de la retrospectiva cronológica de un pintor que ciertamente me ha cautivado.
EL TANGO DEL ARCANGEL.
BLUES DE MONTPARNASSE.
DIVERSION.Como buen anarquista se adentro en pintar cierta realidad social, a modo de denuncia, sus escarceos por el París bohemio retratando esas clases sociales que habitan en los bajos fondos, reflejo de una época convulsa, evolucionando hacia terrenos más mundanos no solo como artista sino como persona, en sus últimos años ya en Mónaco parecía ser un personaje más de los cuadros de su etapa final, un personaje salido de EL GRAN GATSBY.
Pinto la opulenta decadencia de una aristocracia y burguesía en plena belle epoque y el crack del 29, retrato esa languidez transitoria y vital de personajes reflejados en tantas novelas de Scott Fitzgerald, un conjunto de Gatsbys residiendo en la Costa Azul y París exprimiendo rentas heredadas.
TRES MUJERES SOBRE FONDO ROJO.
MUJER DE OJOS AZULES. 
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