EL ARQUITECTO COMO PROFETA.

El arquitecto debe ser un profeta... Un profeta en el verdadero sentido del término... Si no puede ver por lo menos a diez años vista no lo llamen arquitecto.

Frank Lloyd Wright.

Interior del Museo Solomon Robert Guggenheim de NY.

Museo Solomon Robert Guggenheim en 1959.

Museo Solomon Robert Guggenheim a principios de los 60.

 

Museo Solomon Robert Guggenheim a finales de los 60. 

Museo Solomon Robert Guggenheim en los 90. 

Museo Solomon Robert Guggenheim en la actualidad.

Situado en la isla de Manhattan, el Museo Solomon Robert Guggenheim esta ubicado en una zona privilegiada, (la esquina de la calle 89 y la 5ª Avenida, frente a Central Park) también llamada como Museu Mile Avenue en ese tramo.
De por si obra de arte, el Guggenheim almacena dentro de sus entrañas la colección privada de arte moderno de Salomon R. Guggenheim. El proyecto tardo 15 años en construirse pues la visión futurista del maestro choco con los clientes, no se termino hasta 10 años después de fallecer Solomon R. Guggenheim y 6 meses desde la muerte del genio de la arquitectura.

Puede que no sea el mejor museo del mundo, pero la visión renovadora sobre el concepto de edificio que ha de almacenar y mostrar las obras de arte, museo, fue semilla de los actuales proyectos museisticos, a esta visión hace referencia Wright pues la obra arquitectónica, en cierta manera ha de ser imperecedera y sobre todo nunca ser terminada cuando el estilo ha sucumbido a nuevos aires y visiones.
Si bien es cierto que la prolongación en 1992, es decir, la ampliación, de la que fue objeto el museo fue un error, y una autentica barbaridad, ensuciando la obra de Wright.

Pero al final la obra arquitectónica, no es propiedad del arquitecto, ni le pertenece.

Claro que no me imagino yo a un vecino de La Pedrera cerrando su balcón con aluminio o PVC de los hermanos Almansa...Sic Transit Gloria Mundi.