Un encuentro casual entre dos personas que compartirán 20 años de nuestras vidas con las posteriores entregas. Un día paseando por las calles de Viena, charlando, conociéndose y a medida que avanza el día se acercan el uno al otro, es el preludio de una gran historia romántica entre dos personajes corrientes que en 1995 están dando sus primeros pasos para alcanzar sus metas.
Nueve años después se realizó Antes del atardecer (Before sunset, 2004), la segunda entrega, retomando la historia entre Jesse y Céline casi una década después de su encuentro en Viena. Los dieciocho años que van desde Antes del amanecer (Before sunrise, 1995) a Antes del anochecer (Before midnight, 2013) es el tiempo en que los personajes crecen y se desarrollan en tiempo real. La cámara es testigo del primer encuentro y de como nace el amor entre ellos y cada nueve años nos acercáramos para ver cómo les va en su recorrido vital y como avanza su relación sentimental. Igual que ellos, el espectador, nosotros, evolucionamos entre películas al mismo ritmo que lo hacen ellos; nos hemos enamorado, engañado, vivido momentos felices y algunos trágicos, ha encontrado trabajo o ha acabado sus estudios etc; el espectador ha crecido al tiempo que los personajes y como los personajes, en un mundo paralelo entre la realidad y la ficción.El tiempo entre películas es fundamental para entender la trascendencia de la trilogía y hacernos propia la historia.
Continuará...
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