SPORT : CARTA DE DESPEDIDA DE VICTOR VALDES.
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Los porteros, esos locos con guantes y
cara de pocos amigos, esos especialistas del fútbol, esos que suelen
estar más solos que la una en muchos momentos de un partido, esos
que parece que juegan a un deporte distinto que el resto de sus
compañeros de equipo... los personajes más individualistas dentro
de un deporte de equipo, esos que solo pueden jugar de lo que son,
sin opción de ser polivalentes, esos que suelen tener a su máximo
rival compitiendo por su puesto.... Los porteros... el más malo de
la clase con los pies y que no le queda más remedio que si quiere
jugar ser... portero... Si, esos locos con guantes tan particulares
dentro del fútbol... Y Valdés no ha sido una excepción al
definirlo de loco, particular o excéntrico; el mejor portero de la
historia del FCB según muchos que no ha dejado nunca indiferente a
nadie, acerrimos seguidores y mil detractores; Valdes ha sabido
aguanta la presión de una de las porterías más complejas del
fútbol, titular indiscutible durante más de 10 temporadas decidió
hace más de un año dejar la disciplina del FCB para empezar una
nueva aventura en otra liga, en otro fútbol, en otro dimensión...
No me gustan los porteros excéntricos, soy más de porteros sobrios
como fueron Zubi, Zoff o Shilton... Valdes te daba seguridad pero ese
grado de locura a veces le jugo malas pasadas, reconociendo los
méritos y las cualidades que ha tenido y tiene el portero del
Hospitalet siempre me ha parecido un personaje, y digo personaje
porque no conozco a la persona y al parecer difiere mucho de la
imagen publica que da, chulesco, distante y con un punto borde y de
cierta soberbia que me lo confirma en el momento de su despedida y de
como la ha ejecutado. Su decisión de no seguir es del todo
respetable, es más, incluso la veo hasta lógica, la presión de
esta portería quema a cualquiera y el la ha soportado con excelente
aplomo durante muchos años, pero hay formas y formas de decir adiós
al club que te lo ha dado todo independientemente del trato que te
han dado y has dado a los responsables del club, el FCB esta por
encima de las personas, estas solo están de paso por la institución,
pero el club permanece y es el club el sentamiento unificador de
muchas personas que piensan y actúan diferente a uno. Valdes podía
haberse ido por la puerta grande, salir a hombros por la puerta de
tribuna como el gran torero que ha sido, pero ha preferido ser como
es e ir a la suya dejando ese poso de resquemor que parece tener con
cierta gente del club. Tuvo la mala fortuna de lesionarse de
gravedad, pero incluso en el mejor guión de cine este final de su
trayectoria en el FCB sería algo impensable; apartado del día a día
del equipo su ausencia ha sido muy significativa en el tramo decisivo
de la temporada, aumentando esa amarga sensación que deja su salida
del equipo, pero lo que ha colmado el vaso del triste adiós ha sido
su marcha a Alemania para continuar con la recuperación a solo una
semana vista del final de temporada del equipo donde se juega el
éxito o fracaso de una temporada que habrá que analizar
detalladamente. Cuando como capitán del equipo debería haber estado
con sus compañeros haciendo piña ha decidido despedirse en la
intimidad y a través de carta, dejando a la afición, que le ha
apoyado, ha sido suya y que en definitiva en su justa medida y
proporción le paga su sueldo con el culo al aire e incluso con
cierto grado de mala educación y sobre todo formas.
Valdés pasa a la historia como el
portero más laureado del FCB, pero empaña su leyenda con una salida
de niño mal criado y caprichoso, debería pensar que es ídolo para
muchos niños y que su ejemplo de deportista de élite va acompañado
de una especie de obligación ético-moral que se ha de ver reflejada
también fuera del campo y Víctor Valdés, sus razones tendrá, no ha
sabido estar a la altura de lo que significa ser el portero del FCB.
Deseo que siga siendo uno de los
mejores porteros del mundo allá donde vaya pero también deseo que
algún día explique la verdad del porque su amarga despedida de la
casa que le ha hecho ser lo que es.